Desde los primeros días de los medios, existe un intercambio desigual entre autores y plataformas.
Plataformas a cambio de acceso a una audiencia que atraen a través de autores y venden a los anunciantes. Hacen buen dinero, pero los autores en el mejor de los casos consiguen honorarios de publicidad mínimos.
Atar artificialmente a la audiencia a la plataforma, y obligar a los autores a competir por la atención, lo que conduce al agotamiento.
Queremos que los autores sean independientes y dediquen más tiempo a su pasión y creatividad. Tenían acceso a su audiencia y el máximo número de herramientas de monetización.
Por eso se creó FANZOONE.
